Con tanto descuento, resulta un poco difícil prestar atención a nuestras verdaderas necesidades y el deseo de adquirir productos nuevos termina invadiendo nuestro sentido de racionamiento, no te endeudes con productos poco provechosos.
Puedes hacer una lista de productos que necesites próximamente y aprovechar los descuentos del buen fin para adquirirlos, de esta manera estarás ahorrando no solo tu dinero si no también tú tiempo.
2.- Asegúrate de estar adquiriendo un verdadero descuento.
Muchas empresas se cuelgan de estas fechas para aprovecharse de los consumidores ansiosos por alguna rebaja. Puedes revisar la página www.elbuenfin.org en donde encontraras a las empresas afiliadas a esta iniciativa junto con los descuentos que ofrecen, de esta manera ampliaras tus expectativas sobre las ofertas en general.
3.- Ponte un límite.
3.- Ponte un límite.
Si bien es cierto que los meses sin intereses son de gran ayuda para adquirir toda clase de productos, no se trata de vivir una vida pagando el mismo artículo, si el plazo de pago del bien es mayor a su vida útil, puede ser que realmente no te convenga esa transacción.
4.- Analiza los precios, no te endeudes.
Crédito no es sinónimo de disponibilidad económica, genera tus propias estrategias, analiza el monto de tus ingresos y considera que estos no están totalmente disponibles para las compras espontáneas que hagas, de hecho se recomienda no adquirir una deuda mayor al 30% de tus ingresos, de esta manera podrás afrontarla sin descuidar tus compromisos económicos, en cada compra que hagas ten presente tus pagos fijos, tales como los gastos de alimentación, transporte, deudas, educación y servicios que contratas, entre otros, recuerda que escoger el mejor método de pago no siempre involucra un crédito.
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